“No debáis a nadie nada. Al que honor, honor. Y a los ancianos que se dedican a enseñar, trafagadlos con doble honor” - Rabino Shaul, siglo 1.
Quien aprende de su compañero un capítulo, una halajá, un verso, una palabra o incluso una letra (de la Toráh), está obligado a tratarlo con honor; porque así encontramos con David, rey de Israel, quien aprendió de Ahitofel no más de dos cosas, pero lo llamó su maestro, su guía y su querido amigo, como se dice en el libro de Tehilim/Salmos 55:14:
"Pero fuiste tú, un hombre igual a mí, mi guía y mi querido amigo”.
¿No es esto [una instancia del argumento] “de menor a mayor” (kal vehomer)? Si David, rey de Israel que aprendió de Ahitofel no más de dos cosas, lo llamó su “maestro, su guía y su querido amigo”; luego, en el caso de alguien que aprende de su compañero un capítulo, una halajah, un verso, una palabra o incluso una letra, tanto más tiene la obligación de tratarlo con honor.
Y "honor" no significa más que Torá, como se dice, "Es el honor que los sabios heredan" (Proverbios 3:35). “Y el perfecto heredará el bien” (Proverbios 28:10), y “bien” no significa nada más que la Torá, como se dice, “Porque te doy buenas instrucciones; no abandones mi Torá” (Proverbios 4: 2).
- Pirké Avot. Siglo 2.
Comments