Parashat Vayeshev: Superando el estrés y manteniendo la fe.
Shalom estimada mujer virtuosa,
¿Alguna vez te has sentido como si el mundo se te viniera encima? Yo también. Y justo ahora, leyendo la Parashat Vayeshev (Génesis 37:1-40:23), me di cuenta de cuánto podemos aprender de la historia de Yosef (José). Quiero compartirte algo que me conmovió, porque sé que también puede ayudarte a ver las cosas desde otra perspectiva.
Yosef: Un ejemplo de resiliencia
Imagínate a Yosef, un joven amado por su padre, lleno de sueños, pero rechazado por sus propios hermanos. No solo lo vendieron como esclavo, sino que también lo alejaron de su hogar y lo dejaron en una tierra extraña. Si eso no es suficiente para romper el espíritu de alguien, no sé qué lo sería. Pero ¿sabes qué? Yosef nunca perdió la Emunah (fe). Incluso en sus momentos más oscuros, confió en que HaShem estaba con él. Hay un pasaje en la Torá que siempre me hace reflexionar:
וַיְהִי יְהוָה אֶת־יוֹסֵף וַיְהִי אִישׁ מַצְלִיחַ
Vay'hi Adonai et-Yosef vay'hi ish matzliaj
"Y Adonai estaba con Yosef, y él era un hombre próspero" (Bereshit 39:2).
Qué poderoso, ¿verdad? A pesar de todo, Di-s nunca lo dejó solo. Este pasaje nos recuerda que no importa cuán profundo parezca el pozo, la presencia de Dios es una muestra de su fidelidad.
¿Qué podemos aprender de Yosef?
La Emunah (fe) no es una carga, es nuestra fuerza. Sé que a veces es difícil confiar cuando todo parece ir mal. Pero Yosef nos muestra que Di-s siempre tiene un plan, aunque no lo entendamos de inmediato.
La resiliencia nos hace más fuertes. Yosef pasó de ser esclavo a convertirse en el segundo al mando en Mitzraim (Egipto). Su perseverancia y fe lo llevaron a cumplir el propósito que Di-s tenía para él.
Nunca estás sola. Incluso cuando Yosef estaba en prisión, Di-s estaba con él. Eso me recuerda que, aunque nos sintamos aisladas o incomprendidas, nunca estamos realmente solas.
Aplicando esto a nuestras vidas
Amiga y hermana de la Emunah, sé que tus días pueden estar llenos de responsabilidades, que a veces las cosas no salen como esperabas, y que las preocupaciones pueden parecer demasiado. Pero quiero animarte a que tomes un momento para respirar y recordar que, así como Di-s estaba con Yosef, también está contigo. No importa que tan oscuro o dificil veas tu situación, recuerda esto: "HaShem esta contigo".
Cuando sientas que ya no puedes más, te invito a hacer una oración sencilla, algo como:
"Adonai, dame la fuerza para enfrentar este día. Sé que Tú estás conmigo, incluso en los momentos más difíciles. Ayúdame a confiar en Tu plan para mi vida. Bendito sea tu Nombre glorioso, lleno de Shalom. Amén."
El ejemplo de Yeshúa
Yeshúa también enfrentó pruebas y rechazos, pero siempre se aferró a su confianza en Hashem. En el Código Real, en Yohanan/Juan 16:33 se nos recuerda las bellas palabras de Yeshua:
"Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis Shalom. En medio de las autoridades de esta generación, tendréis aflicción, pero confiad, yo las he vencido"
Esto nos invita a confiar y caminar con esperanza, sabiendo que no estamos solas, las palabras de la Torah, los Salmos entonados desde el corazón de David y la Emunah que nos dejó Yeshua cómo una guía, son nuestras herramientas para usarla en medio de las dificultades.
Una reflexión final
La vida de Yosef me enseña que, aunque no podemos controlar lo que nos sucede, sí podemos decidir cómo respondemos. Mantén tu Emunah (fe), porque ella es la llave para superar cualquier adversidad. Y recuerda, no estás sola. HaShem siempre está ahí si necesitas hablar con Él.
Reflexiona: ¿Qué situaciones en tu vida se parecen a las de Yosef? ¿Cómo puedes aplicar su ejemplo para enfrentarlas?
PD de Emunah: Si te gustó esta reflexión, comparte este mensaje con alguien que también necesite un poco de esperanza. Con un solo clic puedes estar ayudando a llenar el corazón con fe de alguien que quizás lo necesite y aún no te lo ha dicho. 💕
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