La terapia de protones, aclamada como un asesino de cáncer sin efectos secundarios, se prepara para su debut en Israel El Centro Médico Hadassah se asocia con la empresa israelà P-Cure en un estudio que compara el tratamiento con radiación de rayos X tradicional; Ichilov firma un acuerdo para el primer centro de terapia de protones.
El personal del Centro Médico Hadassah asiste a una paciente de ensayo clÃnico de cáncer de cabeza y cuello antes de someterse a terapia de protones por parte de P-Cure, Modiin, Israel, abril de 2023. (CortesÃa de P-Cure) La terapia de protones para el tratamiento del cáncer ha llegado a Israel y Oriente Medio con un ensayo clÃnico en marcha en el que el Centro Médico Hadassah se asocia con P-Cure, una empresa israelà que ha desarrollado un sistema único diseñado para adaptarse a los entornos hospitalarios existentes.
Comenzado hace un mes, la primera etapa del ensayo se dirige a pacientes con cáncer cerebral, de cabeza y cuello que previamente han sido irradiados pero han experimentado una recurrencia. Los pacientes con otros tipos de cáncer se incluirán más adelante.
Además, el Hospital Médico Tel Aviv Sourasky - Ichilov firmará un acuerdo el jueves con Medtechnica, el socio israelà de IBA, una empresa belga que está construyendo la máquina de acelerador de protones médica más grande y avanzada del mundo.
"El Ministerio de Salud nos ha concedido la única licencia para operar un centro nacional de terapia de protones. Se consideró que éramos la mejor opción y hemos comenzado la construcción de un edificio designado", dijo el Dr. Natan Shtraus, jefe de fÃsica médica en Ichilov.
El edificio albergará dos salas de tratamiento, cada una con una máquina, y deberÃa estar completado en tres o cuatro años.
Como su nombre indica, la terapia de protones utiliza un haz de protones en lugar de los rayos X convencionales (fotones) en la radioterapia. La ventaja del haz de protones es que es más preciso y menos tóxico para los tejidos sanos circundantes.
Reducir o eliminar los efectos secundarios debilitantes de la radiación es un tema clave. Aproximadamente el 50 por ciento de los pacientes con cáncer se someten a radioterapia en algún momento, a menudo en combinación con cirugÃa, quimioterapia e inmunoterapia.
"La radiación de rayos X fotónicos daña más los tejidos justo cuando entra en el cuerpo, y luego el haz sigue golpeando el tejido todo el camino. El daño máximo ocurre al principio y luego el haz llega al tumor. Luego continúa dañando los tejidos detrás", dijo el fundador y CEO de P-Cure, el Dr. Michael Marash.
Explicó que una solución alternativa ayuda a ofrecer un efecto terapéutico mayor, "pero al final del dÃa, todo el cuerpo recibe la radiación y eso no es seguro", agregó.
En cambio, la terapia de protones ofrece un haz de partÃculas que se detiene en el tumor y no afecta a los tejidos sanos circundantes.
Un estudio publicado en el Journal of the American Medical Association (JAMA) en 2020 demostró que los pacientes tratados con terapia de protones tenÃan menos probabilidades de sufrir efectos secundarios graves. Sin embargo, no hubo diferencia en cuanto a la esperanza de vida de los pacientes.
Algunos en la comunidad médica han argumentado que aún está por verse si la terapia de protones es realmente la opción superior y que vale la pena el gasto hasta que se realicen ensayos clÃnicos aleatorizados de fase 3.
La terapia de radiación de protones para el tratamiento del cáncer existe desde mediados de la década de 1950, pero se utilizaba raramente. Comenzó a ser más utilizada hace un par de décadas, pero a pesar de sus ventajas percibidas sobre el tratamiento tradicional de radiación de rayos X, solo alrededor del uno por ciento de los hospitales y centros de cáncer en todo el mundo la adoptaron debido a los costos involucrados.
No solo los sistemas en sà son costosos, en el rango de 200 millones de dólares, sino que sus tamaños generalmente requieren la construcción de edificios especialmente dedicados con paredes de protección de tres a cinco metros de espesor. Las salas que se están construyendo en el Hospital Ichilov tendrán una altura de 12 metros y estarán diseñadas para acomodar los sistemas de 70 toneladas, que incluyen el acelerador de protones junto con equipos de imágenes y monitoreo.
Los pacientes de cáncer individuales también han soportado costos enormes. Hasta ahora, los israelÃes que optaban por la terapia de protones tenÃan que viajar al extranjero para recibir tratamiento y pagar un promedio de 100,000 dólares.
Las máquinas que adquirirá Ichilov tendrán un gantry completo, lo que significa que el haz de protones se rotará alrededor del paciente, que estará acostado.
"Preferimos hacer la terapia de protones con el paciente acostado porque es una posición mucho más estable. También es la única forma en que se puede tratar a pacientes bajo anestesia, principalmente niños", dijo Shtraus.
"Además, los tumores se mueven. No hay una lÃnea media en un tumor. Por lo tanto, es mejor mantener al paciente estable y mover el gantry alrededor de ellos", agregó.
Shtraus mencionó el ejemplo del meduloblastoma, un cáncer del sistema nervioso central y el tumor cerebral canceroso más común en niños, que requiere la irradiación de la columna vertebral. Dijo que con la terapia de protones, la columna vertebral de los niños y las mujeres embarazadas pueden recibir tratamiento dejando sus "vientres limpios".
El enfoque de P-Cure es diferente. Han desarrollado un sistema menos costoso que es más compacto y puede adaptarse a las bóvedas de radiación de las instalaciones médicas existentes. Esta máquina tiene al paciente sentado y reposicionado alrededor del haz. La idea es lograr mejores ángulos para que el haz de protones alcance los tumores.
Fuente: timesofisrael.com/proton-therapy-touted-as-cancer-killer-without-side-effects-set-for-israel-debut/